10 KMS DE VALDEMORILLO

Después de un verano en el que no he entrenado más de 30-35 minutos y unas merecidas vacaciones, empieza la nueva temporada con un único objetivo: La Maratón de Madrid. Todo el trabajo que voy a realizar durante el otoño y el invierno va ha estar destinado a ese objetivo, iré acumulando kilómetros y alguna que otra media a partir de noviembre hasta cruzar la línea de meta tras las 4 horas de correr por las calles de Madrid.

Pero antes de todo eso, me he reencontrado con “la alta competición” en los 10 kms de Valdemorillo, carrera con la que cumplo las tres necesarias para conseguir el dorsal del MAPOMA.

Esta domingo me he presentado en la línea de salida con entrenamientos cortos, con la uña del dedo negra y dolorida, y en medio de un proceso de itv con el dentista… así que con ese panorama no me planteé otra cosa que no fuera rodar tranquilo, a un ritmo llevadero y disfrutar. A todo esto se unió el duro recorrido de la prueba, con constantes subidas y bajadas, curvas y más curvas que no te dejaban poner un ritmo constante en casi todo el recorrido y el astro sol, que no se quería perder esta bonita carrera porque apretaba bastante fuerte. El tiempo final fue de 53:02, que como el primer entrenamiento medianamente serio y como punto de partida de la temporada esta bien.

Tengo que dar la enhorabuena a Valdemorillo por el recorrido, ya que trascurrió por las calles del pueblo. Lo fácil hubiera sido como en mucho pueblos mandarnos a un polígono, a caminos y todo ello para no molestar mucho, pero Valdemorillo tuvo el atrevimiento de convertir una carrera popular en una fiesta y esto es algo que personalmente valoro muchísimo. Además los vecinos salieron a la calle, unos a animar, otros a comprar el pan y otros a misa… pero todos con mucha paciencia y con ilusión de ver el pueblo así.